En un lugar lejano existía una ciudad llamada Nevado en la que no conocían la Navidad. Nunca habían sentido la felicidad que se siente en estas fechas. Unos viajeros fueron de viaje a Nevado. Cuando salieron de visitar un monumento, un montón de niños se acercaron a los viajeros. Y les preguntaron:
-¿Qué se habían pedido para los Reyes Magos?
-¿Quiénes son esos? preguntaron los niños.
Al oír la pregunta de los niños se quedaron extrañados y entonces les explicaron que eran 3 señores que se llamaban Melchor, Gaspar y Baltasar, que la noche del día 5 de enero reparten regalos a todos los niños que se portan bien y carbón a los que se portan mal.
Los viajeros regresaron a su ciudad y al siguiente año volvieron a Nevado con montones de regalos, se los repartieron a toda a la gente. Y les fueron contando todo sobre la Navidad (la familia se reúne, se celebra el nacimiento de Jesús, montan belenes, se cuentan cuentos de Navidad, cantan villancicos, se mandan postales para felicitarse las fiestas, etc.) También llegaron los Reyes Magos y Papa Noel.
Y reinó la felicidad para siempre en Nevado.
Pero el mayor problema era que había mucha gente enferma porque sólo comía dulces y grasas ya que no tenían ni verduras ni frutas. Entonces los viajeros les llevaron frutas y verduras y les enseñaron a cultivarlas ellos mismos. Y así siempre estaban sanos.
El siguiente año los habitantes de Nevado visitaron Burgos invitados por los viajeros y conocieron nuestra impresionante Catedral, el Castillo, la Cartuja de Miraflores y el supermoderno Museo de la Evolución Humana, incluso los Yacimientos de Atapuerca, y se quedaron alucinados.
Eduardo: Un cuento original y bonito ¡Felicidades!
ResponderEliminarCarmen.