jueves, 8 de enero de 2009

El asno vestido con piel de león

Cierto día un asno encontró un paquete por el camino. Para su sorpresa contenía una piel de león. El burro se puso tan contento que se vistió con ella mientras exclamaba: - ¡Estupendo! justo lo que andaba buscando.
A continuación fue a mirar su reflejo en una charca.
- ¡Ahora soy un león! ¡Voy a enseñar a todos a no reírse de mí!
Y el burro se encaminó hacia el bosque con aire de superioridad. Primero se encontró a un jabalí, éste se dio tal susto que salió corriendo a toda prisa hasta estrellarse con un árbol y quedarse sin conocimiento.
- ¡Qué divertido! - dijo el burro satisfecho de su éxito.
Poco después se encontró con un zorro que, al verle, quedó petrificado de miedo.
Señor león, es usted un animal digno y noble ¡no me devore! En poco tiempo todo el bosque tenía una gran confusión por el falso león. Aterrorizados los monos por las ramas de los árboles y los conejos por el suelo, huían.
- ¡Qué divertido! - se dijo el asno. Si rugiera como un león, daría más miedo aún.
Y se puso a rugir. Al menos eso pensaba él, pues su rugido parecía un rebuzno.
- ¡Escuchad, escuchad todos¡ -exclamó el mapache. ¡No estáis ante un león sino ante un asno disfrazado de león! Y así fue como los animales del bosque muy enfadados, descubrieron el engaño del borrico.

Moraleja: un disfraz puede ocultar a un tonto, pero no sus palabras.

3 comentarios:

  1. Jorge, has expresado muy bien lo que puede llegar a hacer la ignorancia.
    ¡Disfruta aprendiendo cada día un poco más!

    ResponderEliminar
  2. Hola, Julita:
    De nuevo te envío un saludo y ¡FELIZ 2009!

    ResponderEliminar
  3. Muchas gracias "jfmarcelo". También nosotros te deseamos que el 2009 sea un año próspero para ti y los tuyos.

    ResponderEliminar

LinkWithin

Related Posts with Thumbnails