
Cuando pasó un mes se dedicó a ir al colegio para dar clases a los niños y para enseñarles más cosas.
Pasaron los dos meses y Tom se despidió de todos, les dijo que no se preocuparan, que tendrían que recibir alguna clase más para aprender poco a poco.
Cuando murió Tom, su hermano se dedicó a gobernar la ciudad, ordenó que quemaran todos los libros de Matemáticas y que destruyeran todo lo relacionado con ellas. Un amigo que le visitó le dijo que si lo destruyese, no habría luz, no se podrían construir casas, tampoco habría horario, ni números para contar, no habría nada porque las Matemáticas están en todas partes y, si las destruyésemos por completo, el mundo se descontrolaría.
Así fue cómo Álex comprendió que aunque a él no le gustasen, tenía que cuidarlas porque la Tierra está gobernada por los números. Tom cumplió su sueño y, la gente de aquella ciudad vivió feliz aprendiendo, calculando y haciendo estadísticas y hoy nosotros también podemos disfrutar con ellas.
Tu cuento me ha parecido muy bien expresado y hecho.
ResponderEliminarDe Raúl
También la profe te felicita, Iván porque has relacionado elt ema de tu cuento con lo hablado en clase sobre Hipatia.
ResponderEliminares un cuento muy bonito y yo estoy orgullosa de como estas avanzando sigue asi cariño
ResponderEliminarMe ha mucho gustado la historia y tambien también la ilustración .
ResponderEliminarÁngela González
Me ha mucho gustado la historia y tambien también la ilustración .
ResponderEliminarÁngela González
hola ivan me ha gustado mucho tu historia y la ilustracion.
ResponderEliminarandrea
TIENES MUCHA RAZON Y ME GUSTA MUCHO,
ResponderEliminarY ES CASI UNA HISTORIA REAL.
ANDREA
Me ha gustado el cuento porque habla sobre las Matemáticas, que hay que aprender muchas cosas de ellas.
ResponderEliminarme ha gustado mucho tu cuento y ademas tienes mucha razon porque si no existiesen las matematicas como ibas a contar la propina que te dan para comprar chuches jiji
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